El trampolín de la muerte es una de esas carreteras sudamericanas que quitan el hipo. Tiene todos los ingredientes para que su tránsito sea una aventura inolvidable: esta situada en altura, tiene tramos muy estrechos en los que tan solo puede transitar un vehículo, tiene caídas de más de 300 metros, cuando llueve es intransitable y además puede que haya derrumbes de tierras. Así que, con todo esto, el trampolín de la muerte no es algo para tomarse a la ligera.
El trampolín de la muerte, que se encuentra dentro de la región montañosa de Putumayo, une los pueblos de Mocoa, a unos 600 metros sobre el nivel del mar, con San Francisco, a algo más de 2.100 metros, pero sus puntos más altos llegan hasta los 2.300 metros.
La carretera es corta pero intensa, ya que los dos pueblos están separados por unos 80 kilómetros de distancia.
Seguramente sea la carretera más peligrosa de Colombia, y es que cada año hay varios accidentes en su tránsito, muchos de ellos con victimas mortales. Tristemente popular fue el trágico suceso acontecido el 22 de Julio de 2008, ya que en tal fecha un autobús de la compañía colombiana Cootransmayo cayó al abismo de la carretera dejando 23 muertos y 22 heridos.
Estos casi 80 kilómetros de terror sin pavimentar se construyeron a principios de la década de los 30, durante la guerra entre Perú y Colombia. El hecho de que sea un paso sin pavimentar y extremadamente estrecho no hace que vehículos pesados transiten por el, aunque debería estar prohibido. Así, imagínate lo que puede suceder cuando un trailer y un autobús se cruzan en el camino.